Cuartos oscuros en la Ciudad de México
Las cosas están intensas últimamente. Necesitamos relajarnos. Algunos de nosotros pasamos la noche de fiesta dentro de un club de encuentros. También conocidos como cuartos oscuros, estos lugares son un testimonio histórico de la conquista y apropiación del espacio público por parte de los homosexuales en muchas ciudades del mundo, y la Ciudad de México no es la excepción. Surgieron de la necesidad obligada de socializar entre pares sin inhibiciones, sacrificios ni prejuicios; de ejercer ese erotismo que en última instancia define la homosexualidad, en un entorno alejado de la censura y la vergüenza.
Verdad: estos espacios, al desafiar las buenas costumbres heteronormadas, están destinados a ubicarse más o menos en la marginalidad práctica; sin embargo, ese halo de misterio es lo que agita mariposas en el estómago por la expectativa y la emoción. También funcionan como sitios que reinventan el flujo urbano, contribuyendo a un dinamismo que, con el tiempo, se vuelve parte de la historia de la lucha por la dignificación de la comunidad homosexual. ¿Cómo olvidar el bullicio del cuarto oscuro de los buenos tiempos de El Taller o La Estación, que estaba en la calle de Hamburgo en la Zona Rosa, con sus policías pintados en las paredes, bajo sirenas rojas y entre jaulas? Hoy estos episodios se recuerdan con sudoroso cariño, y si no fuera por ellos, la Ciudad de México seguiría empapada de tradición…
Tom’s Leather Bar
Una verdadera leyenda masculina de la Ciudad de México, testigo y sobreviviente de la conservación de la cultura leather. Sus profundidades son un clásico de la vida nocturna gay en CDMX, y sus martes de Tom son una institución que rompe con el respeto a la semana laboral godín, con asistentes que no paran de aumentar. Una de las experiencias más genuinas de cuarto oscuro, con música que va desde la ópera, punk, pop hasta electrónica atemporal, ha hecho de Tom’s uno de los favoritos. Una experiencia indispensable.

Sodome
La mejor sauna de CDMX: altamente selectiva y sofisticada, sus pasillos son una maestría de deseo arquitectónico y buen gusto. Además de las toallas alrededor de la cintura, Sodome se está posicionando como uno de los lugares donde se pueden descubrir nuevas tendencias de música electrónica, que no se escuchan en los clubes habituales, incluidos los hetero. Retoma así esa gloriosa tradición de hacer de los espacios gays un hervidero de vanguardia.
Dirección:
Mariano Escobedo 716
Anzures
Ciudad de México, DF 11560
Horario:
Mar-Mié 4pm-12am, Jue 4pm-4am, Vie 4pm-Dom 11pm (sin parar)
Sitio web: http://www.sodome.com.mx/
La Casita
Este es un club privado, cerrado al público en general, lo que lo hace “más seguro” (entendiendo que aún no existen espacios 100% seguros en nuestra ciudad). Todos los encuentros son consensuados, y están ubicados en 4 diferentes sedes, que suelen estar abiertas las 24 horas, todos los días del año. Aseguran que sus espacios están bien conectados y son de fácil acceso, por lo que cumplen con todas las medidas de seguridad. Además de eso, ofrecen proyecciones de video, salas de encuentros, cuartos oscuros y más. Para conocer sus ubicaciones y costos, puedes escribirles o llamarles. Te dejamos los números:
Whatsapp: 5534875695
Teléfono: 55244639
FB: La Casita CDMX
Sitio web: https://lacasita.mx/
Cuartos oscuros Club Antifaz
Este es un club que parece estar algo oculto, con una pequeña puerta en Eje Central Lázaro Cárdenas, casi en la esquina con José María Izazaga, entre dos grandes cortinas de acero. Para entrar, debes tocar un interfono. Puedes ir desde temprano, y está abierto todos los días. Como otros lugares similares, tiene cabinas, cuarto oscuro, área de bar, guardarropa y bebidas.
Dirección:
Eje Central Lázaro Cárdenas 130, Centro.
Horario:
Lun-Dom 9am-10pm
Cuartos oscuros Cine Savoy
En el sentido más estricto, este no es un cuarto oscuro, pero en la práctica cumple con los requisitos básicos para ser un espacio de encuentro para la comunidad gay. Tiene una historia única, ya que fue inaugurado en 1943 como un cine normal, al que las familias acudían los fines de semana a ver estrenos. Fue en 1970 cuando se transformó en un cine para adultos que proyectaba únicamente películas pornográficas. Hoy en día, aunque sus encargados lo niegan, es un lugar de encuentros sexuales: compras tu boleto y la permanencia es voluntaria, en cualquiera de sus tres salas. Dos de ellas son de cine gay, y una de cine heterosexual, pero en todas, su público principal son hombres gays. No es el espacio más seguro, el caos reina en cada butaca, así que tenlo presente. El uso de condón no es obligatorio, pero esperamos que comprendas que siempre debes usar uno.
Dirección:
16 de Septiembre 4, Centro.
Horario:
Lun-Dom 10am-9pm
Consejos:
Si nunca has visitado uno de estos espacios, vale la pena compartir algunas recomendaciones para disfrutar la experiencia sin sustos:
- En la mayoría de ellos, la entrada a mujeres está prohibida.
- Son clubes de adrenalina erótica, lo que puede intimidar a primera vista. Es importante relajarse. Si crees que puede ser demasiado para ti, pospón tu visita para no incomodar a los demás.
- El respeto es esencial para disfrutar plenamente la experiencia. Respeta los límites de los demás para que también respeten los tuyos.
- El uso de condón es obligatorio.
- Concéntrate en disfrutar y no en juzgar. Debemos fomentar un sentido de comunidad y no la discriminación.